Poco después el avance mongol en China se detuvo, probablemente debido a dos factores. Por un lado, la propia visión de Gengis Kan le llevó a la conclusión de que una penetración más profunda en China supondría de su recién creado ejército un esfuerzo demasiado agotador, y además lo dejaba a merced de algunos pueblos nómadas no totalmente “domados” que se situaban en sus flancos, y que podían aprovechar el momento para asestar un duro golpe a su imperio. Por otro lado, en aquellos momentos el sur de China se hallaba en una situación bastante más favorable que la zona septentrional, de por sí más débil. El dominio total de China no habría de llegar por tanto hasta los tiempos del nieto de Gengis Kan: Kublai que llegará a ser uno de los más importantes emperadores de China. En estas circunstancias Gengis Kan cesó su avance en China y volvió para eliminar algunos núcleos de resistencia naimanos y merkitas en la zona del Altái.
El derrotado líder de los naimanos se había refugiado con los restos de su ejército en el Kanato de Kara-Kitai y había sustituido a los turcos musulmanes en el gobierno. En ese momento gran parte de sus vasallos se agregaron voluntariamente a las filas del jan mongol. Kuchlug (el líder naimano), tomó serias represalias contra los traidores y contra muchas facciones islámicas que lo apoyaban. De esta manera aquellos que se habían unido al Kan pidieron auxilio y Jebe (otro de los importantes generales de la guardia personal de Gengis Kan) llegó al reino de Kara-kitai con un ejército mongol y fue recibido como un liberador, eliminando a Kuchlug en 1218 e incorporando el reino de Kara-kitai al naciente imperio mongol.
Así, por primera vez, el extenso imperio mongol tenía una frontera con el Imperio corasmio, un estado musulmán gobernado por el sah Mohamed II. Este era un punto comercial muy importante y Gengis Kan había intentado propiciar un libre paso de mercaderes a toda la extensión del imperio, por lo que en un principio no pareció tener intenciones de atacar este estado. Sin embargo, el gobernante de Otrar atacó una importante caravana que regresaba de Mongolia y que además llevaba una misión diplomática mongola, negándose más tarde a pagar retribución por el saqueo y asesinato de sus miembros. Esto, y la tentación de hacerse con el control total de las rutas comerciales entre oriente y occidente, impulsaron a Gengis Kan a atacar a los musulmanes.
De nuevo, recopilando información de los mercaderes, preparó con gran cuidado su ataque, que dividió en tres grupos. El sah, que no confiaba demasiado en su ejército por diversas disquisiciones internas, había dividido sus contingentes en grupos pequeños, fáciles de asaltar por separado, quizá para asegurarse que no adquiriese demasiado poder el factor militar. Esta falta de cohesión dentro del propio estado musulmán, y la actitud del sah, que escapó con su corte en cuanto los mongoles hicieron su aparición, propició una rápida victoria por parte de Gengis Kan y sus generales. Así, asoló Bujará y Samarcanda, que se había convertido en la capital de Corasmia, mientras dos de sus generales avanzaban sobre otras ciudades al norte y al sur.
El heredero del sah Jalal ad-Din Mingburnu, por otra parte un genial estratega y muy apoyado por el pueblo, presentó batalla a los mongoles con el ejército que consiguió reorganizar de su padre y a pesar de enfrentarse al grueso del ejército mongol podía haber hecho algo de no verse envuelto en luchas y rivalidades internas. En este caso también se puede decir que la caída del reino corasmio se debió a la inestabilidad interna, principalmente. El avance mongol fue imparable, de forma que cuando el Gran Kan marchó en el 1223 el reino de Corasmia había sido completamente conquistado.
Después de esto Gengis Kan se dedicó a reprimir revueltas y afianzar su poder en el este, en especial en la zona de Hsi-Hsia que se había negado a enviar tropas para la última campaña tras atisbarse focos de posible rebelión. Estos focos no quedaron exterminados hasta la muerte del Gran Kan en el año 1227.
En la imagen: Ejército mongol avanzando. Se ve al khan y al lado el estandarte de colas de jak
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