Canal Barcelona Secreto : Las mejores propuestas dulces para merendar en Barcelona

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 En las prisas del día a día a menudo olvidamos la merienda, y por eso te traemos algunas ideas dulces para que recuperes el amor por esta comida.

Cuando me dicen que el desayuno es la comida más importante del día nosotros siempre pensamos en la merienda. La merienda siempre fue la hija bastarda de nuestras ingestas diarias, la menos valorada, de la que menos se habla, pero con la que más se disfruta.

Y ahora que el brunch  se reivindica como una revolución de la comida entre horas, es hora de reivindicar la merienda, que no se publica en Instagram, pero que se comparte con la abuela; que no se pide en inglés, sino en la vitrina de un forn, que no se hace en una mañana de resaca, sino en una tarde de paseo por el centro de la ciudad.

La Donutería (y otros donuts de la ciudad)

En Sant Antoni se encuentra este pequeño templo del donut. Sus creaciones rebosan color y sabor y cada día puedes encontrar algún sabor nuevo. Nuestro plan favorito: un par de donuts, un café (si no hecho por ellos mismos, el local contiguo, Café Cometa, también tiene muy buen café) y merendar al aire fresco de los chaflanes del barrio.

Y si todavía te quedas con ganas de más, aquí tienes los mejores donuts de Barcelona.

Carrer del Parlament, 20

Churros con chocolate en carrer Petritxol

Pocas cosas más barcelonesas que un paseo por la tarde por la calle Petritxol en busca de un chocolate con churros bien calentito. La calle del chocolate de la ciudad es el epítome de la merienda, el lugar donde, históricamente, los barceloneses han ido a echar la tarde con algo dulce entre las manos.

Nosotros no vamos a ser menos, así que te recomendamos que visites alguna de sus chocolaterías para salir de allí habiendo recuperado la fe en la humanidad (y en la merienda).

Sil’s Cakes

Esta pastelería del barrio de Gràcia se caracteriza por ofrecer repostería americana. Desde sus enormes y deliciosas cookies, hasta sus cinnamons rolls o sus tartas. Todo un espectáculo visual que no decepciona tampoco al paladar.

 Carrer del Torrent de l’Olla, 62

Mistral

De Mistral poco podemos decir que no se sepa ya. Es una de las pastelerías más míticas de Barcelona, ubicada cerca de plaza Universitat, y allí puedes disfrutar de sus icónicos croissants tamaño mini o sus cocas de forner. Un espectáculo que no entiende de dietas.

 Carrer de Torres i Amat, 7; Carrer d’Astúries, 35

Demasié, los cinnammon rolls de la locura

Descubrir Demasié fue descubrir una de las mecas del dulce de Barcelona. Merece la pena echarle un ojo al reportaje que grabamos con ellos, pero merece la pena más aún pasarse por su vitrina, salivar y entrar a probar alguno de sus cinnamon rolls.

Su café también es muy bueno y tienen una gran variedad de dulces e incluso salados como focaccias o sándwiches. Pero si te cuesta decidir, no te líes: ve a por los cinnamons rolls.

Carrer de la Princesa, 28

Los helados entran bien en verano y en invierno, y si todavía no tenías claro cuáles son los mejores helados de Barcelona, nosotros lo tenemos (más o menos) claro. Por eso te dejamos esta lista con la que podrás acompañar una tarde de merienda ideal.

Varias localizaciones

Las minitortitas holandesas de Lekker Café

En esta cafetería ubicada junto a la Basílica de Santa María del Pi sirven pofferjets, unas minitortitas holandesas que casan bien tanto con sabores dulces como salados. Los puedes tomar con frutas, con nutella, con mantequilla y azúcar, pero también con huevos e ibérico o con queso de cabra y nueces. Todo un bocado para merendar viajando por Holanda.

Plaça de Sant Josep Oriol, 6

Chök

Esta pastelería es otro de los principales templos del pecado de la ciudad. Aunque su especialidad son los donuts y los cronuts (un gozoso híbrido entre el donut y el croissant). Aun así, no solo encontrarás allí bocados dulces. Su última creación es una berlina de pan esponjoso rellena de pulled pork.

El mejor croissant del país

Ya te contamos el año pasado que Canal había ganado el premio al mejor cruasán del país otra vez. Basta probarlo para entender el premio pero, por suerte, en Barcelona tenemos un buen puñado de pastelerías que elaboran cruasanes de auténtico lujo.

Y pocas cosas mejores que merendar (y desayunar) un cruasán bueno, así que te recomendamos que te des un paseo por alguna de estas pastelerías una tarde cualquiera para entender por qué toca recuperar la merienda.