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Si estás buscando un destino fuera de España para estrenar el otoño, muy cerca de Nimes encontrarás la mejor propuesta. Se trata de Uzès, un pueblo medieval del sur de Francia que está considerado uno de los destinos más bellos del país vecino. Viajarás al pasado recorriendo sus calles medievales y plazas con soportales, y tómate tu tiempo para disfrutar de su castillo ducal, una joya arquitectónica reflejo de una época en la que la localidad brillaba con gran esplendor.
Qué visitar en Uzès, el primer ducado de Francia
Hay lugares en los que tan solo paseando por sus calles te llegan ecos del pasado. Y esto sucede en Uzès, un pueblo que fue el primer ducado de Francia (1632) y que hoy conserva en perfecto estado todo el legado del Renacimiento. Repleto de torres, mansiones y palacios, te sentirás como si acabases de entrar en plena Edad Media. Pero la historia de Uzès va mucho más atrás y se remonta hasta la época romana, cuando se construyó su famoso acueducto que suministraba agua a la ciudad de Nimes. Se trata del Puente del Gard, una enorme construcción de piedra que se encuentra a 11 kilómetros y que no debes perderte por ser el primer monumento francés incluido en la Ruta Europea de las Antigüedades por la UNESCO.
Pasear por las calles del casco antiguo
En el centro es donde encontrarás el verdadero alma de este pueblo. Por cierto, bajo los soportales de la Place aux Herbes y en las calles colindantes, todos los sábados se celebra un popular mercado donde encontrarás multitud de productos de la región, desde aceitunas a vinos, dulces, artesanía, y evidentemente, también quesos. Si el viaje te pilla en fin de semana, se convertirá en el plan matinal perfecto.
Y a pocos pasos de esta plaza está el jardín medieval, un huerto que nada tiene que ver con los actuales. En este espacio de relax encontrarás más de 450 variedades de plantas, algunas medicinales y también flor de Lys y rosas. Situado en un patio, junto a las Torres del rey y del Obispo (siglo XII), merece la pena ser disfrutado con calma porque es realmente una maravilla.
El Palacio Ducal, un viaje en el tiempo
También en pleno centro se encuentra este conjunto medieval que es uno de los mejor conservados de Francia. Su construcción corresponde a distintas épocas, desde la Edad Media al Renacimiento, pasando por el Siglo de las Luces y la Edad Moderna. Como ejemplos, la torre Bermonde es de estilo medieval (siglo XI), la capilla es gótica y la fachada sobre todo renacentista. También tiene otras zonas que son posteriores. Y no pases por alto el precioso y llamativo tejado, que lleva como decoración el escudo de la Casa de Crussol, familia que posee el titulo ducal más antiguo de Francia. El edificio está habitado aún por sus descendientes, pero al ser un monumento histórico, se puede visitar. Por cierto que desde lo alto de la torre Bermonde podrás disfrutar de una maravillosa panorámica de los tejados del centro histórico.
La torre que te recordará a la de Pisa
Tras el Palacio Ducal, este edificio de 42 metros de altura es uno de los grandes símbolos de Uzès y su forma circular es única en Francia. También llamará tu atención el gran número de ventanas de la torre Fenestrelle, y de ahí su nombre. Se encuentra pegada a la catedral de Saint-Théodorit. De estilo romano y con bastante similitud con la de Pisa, por unos momentos te hará dudar si estás a las puertas de La Provenza o en plena Toscana.
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