CanalViajar20M
La región del Alentejo es una de las zonas más especiales tanto de la Península Ibérica como de Europa, y su cercanía con la frontera con España hace de ella un destino inmejorable para hacer una escapada de fin de semana. En esta parte de Portugal se ocultan muchos pueblos de pequeño tamaño que ocultan impresionantes joyas arquitectónicas y naturales, y uno de los más especiales es sin duda el de Alcazobas.
Esta localidad de poco más de 2.000 habitantes no es una de las más turísticas de la región lusa, pero a los amantes de la historia seguro que les suena: en ella se firmó el Tratado de Alcazobas en 1479, que puso al fin paz entre el Reino de Portugal y las coronas de Castilla y Aragón, con los Reyes Católicos al mando, y con el que ambos imperios se repartieron los territorios del océano Atlántico. Además de su importancia histórica, este pueblo esconde un tesoro incomparable con ningún otro, la llamada 'Capilla de las Conchas', uno de los templos más peculiares del mundo.
Así es la 'Capilla de las Conchas' en el Alentejo
La Iglesia de Nuestra Señora de Conceição, el nombre oficial de este impresionante templo, se encuentra en el corazón de esta pequeña villa perteneciente al municipio de Viana de Alentejo. Fue erigida entre los siglos XVII y XVIII y se enclava dentro del complejo formado por la capilla y el Jardim das Conchinhas, una preciosa zona ajardinada con césped y olivos que aumenta el encanto del lugar.
La particularidad de este monumento religioso es que tanto su fachada como su altar están decorados con miles de conchas marinas traídas desde todos los mares del planeta, convirtiendo a este enclave religioso en toda una obra apasionante. Esta curiosa ornamentación, que forma increíbles dibujos, transmite "una fuerte imagen marítima", como se afirma en la propia web municipal y se pueden encontrar hasta 26 tipos de caparazones alrededor de todo el recinto.
Junto al Paço dos Henriques, un palacio de finales del siglo XIII, es el gran símbolo arquitectónico de Alcazobas. Cada turista que se acerca a esta localidad lusa, bien sea deliberadamente o por casualidad, se sorprende con los espectaculares elementos decorativos que dan al complejo ese toque tan especial que lo hace único. Además, después de visitarlo, siempre se puede aprovechar para pasear por las tranquilas calles de esta localidad portuguesa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario