Tres calas secretas de Cataluña a las que puedes llegar fácilmente en transporte público (Renfe)

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Una cala casi virgen Freepik

Te recomendamos tres playas ocultas de Cataluña a las que puedes acceder fácilmente.

¿Te apetece visitar alguna de las múltiples calas ocultas repartidas por Cataluña, pero careces de coche o no quieres gastar mucho en transporte? Deseo concedido. Hemos rebuscado por ti en redes sociales en busca de recomendaciones chulas y hemos encontrado un vídeo de TikTok de @deviajeconpuppy que precisamente revela tres calas secretas cerca de estaciones de Renfe. Así que solo tienes que gastarte lo que cuesta un billete de ida y vuelta para visitar estas playas.

En caso de que además de calas quieras visitar pueblos pintorescos de Cataluña, tenemos un montón de recomendaciones para este verano: pueblos con encanto, pueblos de marineros, pueblos medievales... ¡No nos hemos dejado ni un solo pueblo por remover!

Cala La Vinyeta

Esta cala de aguas turquesas se encuentra cerca de la estación de Renfe de Calella, a solo 46 kilómetros del centro de Barcelona. Es una playa ideal para viajeros solitarios o para gente que adore relajarse. Una de sus grandes ventajas es que normalmente te encontrarás con poca gente incluso en temporada alta. La entrada al agua es un poco abrupta, eso sí. Atención porque es nudista.

Playa de la Roca Grossa

Esta playa se encuentra entre Calella y Sant Pol de Mar y se encuentra cerca de la estación de Renfe de esta última. Es una cala muy pequeña a la que se puede acceder fácilmente a pie desde el paseo de Calella. Es un sitio ideal para los fans del snorkel. Destaca por su tranquilidad y por sus aguas cristalinas. Si no te gusta la arena estás de suerte porque es una playa de piedrecitas. Atención porque en cuanto te metes al agua enseguida cubre. En caso de que te entre el hambre al salir del chapuzón, tiene su chiringuito.

Cala Pola

Se encuentra muy cerca de la estación de Renfe de Tossa de Mar. Cerca de allí se encuentra uno de los miradores más chulos de la zona: el de Sant Jaume, de unos 100 metros de altitud. Si vas con la familia a Cala Pola, esta es parada obligada de los típicos barcos turísticos que tienen fondo de cristal para ver el fondo submarino. Y si tienes ganas de explorar, cerca hay cuevas marítimas. En el caso de querer tranquilidad, por la zona, si buscas bien hallarás calas más solitarias debido a que están ocultas entre acantilados y abundante vegetación.