Bizcocho de melón super esponjoso y sin gluten, una receta fresquita para saciar el antojo de dulce

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Hay algo especial en el melón cuando llega el calor. Me recuerda a los veranos en casa de mi abuela, cuando lo cortábamos al mediodía y lo servía bien fresco, como si fuera un postre digno de celebración. En la antigua Persia, se decía que el melón era “el fruto que calma el corazón”, y no me extraña: su dulzor natural, su aroma suave, su jugosa frescura... todo en él invita a una pausa feliz.

En esta receta, tomamos esa dulzura natural y la convertimos en un bizcocho sorprendentemente tierno, que apenas necesita ingredientes para brillar. Es un homenaje a lo sencillo, a lo que se hace con lo que hay a mano y se disfruta con los cinco sentidos. Y si además le añades un toque de frutos secos o chocolate, no solo tendrás un pastel sin gluten y saludable, sino también una excusa perfecta para volver a esos pequeños recuerdos que siempre saben bien.

Una receta fresca, fácil y ligera, ideal para aprovechar el melón maduro en verano. No lleva azúcar refinado y puedes hacerla tanto al horno como en freidora de aire.

Ingredientes

• 300 g de melón maduro (tipo cantalupo o piel de sapo)
• 2 huevos grandes ecológicos (claras y yemas por separado)
• 80 g de harina de almendra + 50 g de harina de arroz o yuca (o almidón de tapioca o arrurruz)
(puedes reemplazar la mezcla por harina de avena sin gluten en la misma proporción)
• 1 cucharadita de levadura química (asegúrate de que sea sin gluten)
• 1 cucharada de miel o el endulzan que prefieras (opcional, según el dulzor del melón)

Opcionales para aromatizar o enriquecer la masa:

• Ralladura de naranja o limón
• ½ cucharadita de extracto de vainilla
• Un puñado de frutos secos o chips de chocolate sin azúcar

Elaboración

1. Precalienta el horno a 170 °C con calor arriba y abajo. Forra un molde pequeño con papel vegetal o engrásalo ligeramente.
2. Tritura el melón con las yemas y la miel (si la usas) hasta obtener un puré suave. Añade también la ralladura o la vainilla si decides usarlas.
3. Separa las claras de las yemas. Monta las claras a punto de nieve con una pizca de sal y reserva.
4. Agrega la harina de almendra, el almidón y la levadura química. Mezcla bien hasta que quede homogéneo.
5. Incorpora las claras montadas a la mezcla, poco a poco, con movimientos envolventes para no perder el aire.
6. Si lo deseas, agrega chips de chocolate o frutos secos picados en este momento.
7. Vierte la mezcla en el molde y hornea a 170 °C durante 35–45 minutos, hasta que al pinchar con un palillo salga limpio.
8. Freidora de aire: cocina a 160 °C durante 25–30 minutos. Comprueba los últimos minutos según tu modelo.
9. Deja enfriar completamente sobre una rejilla antes de desmoldar.

Propiedades del melón

Hidratación natural: El melón está compuesto en un 90 % por agua, lo que lo convierte en una excelente opción para mantener el cuerpo hidratado, especialmente en los meses más calurosos del año. Su consumo favorece el equilibrio hídrico del organismo y ayuda a prevenir la deshidratación.

Rico en antioxidantes: Contiene betacarotenos, especialmente en las variedades de pulpa anaranjada, que el cuerpo convierte en vitamina A. Estos compuestos antioxidantes ayudan a proteger las células frente al daño oxidativo y promueven la salud ocular, de la piel y del sistema inmunológico.

Bajo en azúcares: Pese a su sabor dulce, el melón tiene un índice glucémico moderado, por lo que es adecuado para dietas de control de peso o incluso en algunas dietas para personas con diabetes, siempre que se controle la cantidad.

Apoyo digestivo y depurativo: Su contenido en fibra soluble favorece la digestión y ayuda a prevenir el estreñimiento. Además, el alto contenido de agua y potasio actúa como diurético natural, contribuyendo a la eliminación de toxinas.

Fuente de electrolitos naturales: El melón contiene potasio, magnesio y pequeñas cantidades de sodio, minerales importantes para mantener el equilibrio de los electrolitos, especialmente tras una pérdida excesiva de líquidos (como en el ejercicio o el calor extremo).